Un triunfo con sabor a acero
El Estadio de Vallehermoso volvió a ser una caldera en la tarde del sábado. Los Madrid Bravos se impusieron 47-35 a los Helvetic Mercenaries en un duelo vibrante de la European League of Football. El marcador reflejó una victoria amplia, pero el desarrollo del encuentro dejó sensaciones que recuerdan al espíritu más clásico —y a veces desesperante— de los Pittsburgh Steelers: dominio, talento… y momentos inexplicables de relajación.
Arranque demoledor
Desde el primer snap, los Bravos impusieron su ley. El quarterback Reid Sinnett lideró con autoridad, lanzando para 285 yardas y cinco touchdowns. En el backfield, Justus Seelig volvió a ser un cuchillo, acumulando más de 150 yardas totales y dos anotaciones. En el juego aéreo, destacó la figura del retornador y receptor Aron Cruickshank, que volvió loca a la defensa suiza con su velocidad y cambios de ritmo.
Con una ventaja de 27-0 en el segundo cuarto, parecía que el partido estaba resuelto.
Fantasmas familiares
Pero, como tantas veces hemos visto en Pittsburgh, el exceso de confianza abrió la puerta a la reacción rival. Helvetic ajustó y comenzó a mover las cadenas con facilidad. Los Bravos, por su parte, se relajaron en defensa, permitiendo touchdowns innecesarios y errores en cobertura que pusieron algo de emoción en el marcador.
El resultado final (47-35) deja una lectura clara: se ganó, sí, pero con demasiados altibajos. Una victoria que, pese a ser cómoda en lo numérico, no convence del todo en lo táctico. Una victoria muy Steelers.
Ecos de Pittsburgh en la ELF
Más allá del resultado, el partido del sábado y el desarrollo de esta temporada de la ELF están dejando otra historia interesante para quienes seguimos a los Steelers desde este lado del Atlántico: el negro y dorado también se juega en Europa.
Varios jugadores con pasado en la franquicia de Pittsburgh están hoy defendiendo escudos de la ELF. Y no es casualidad.
Uno de ellos es Aron Cruickshank, actual estrella de los Bravos. Tras brillar como retornador en Rutgers y Wisconsin, participó en entrenamientos de NFL con los Chicago Bears y más adelante con los Pittsburgh Steelers, con quienes disputó un partido de pretemporada en 2024. Aunque no llegó a formar parte del roster final, su paso por Pittsburgh le abrió las puertas al fútbol profesional europeo, donde está siendo una de las revelaciones.
También destaca Terry Wright, actual receptor de Frankfurt Galaxy, quien formó parte de la escuadra de práctica de los Steelers en 2019. Aunque nunca jugó en temporada regular, su presencia en la organización fue un hito en su carrera. Wright ha pasado también por otras ligas como la CFL y la XFL, y ahora aporta veteranía y explosividad en el ataque del equipo alemán.
El tercer nombre a tener en cuenta es Steve McShane, quien participó en el minicamp de novatos de los Steelers en 2019. Sin llegar a firmar contrato, su breve paso por Pittsburgh fue el primer escalón de una carrera que le llevó por la XFL y finalmente hasta Europa. Aunque ya no está en la ELF (jugó con Leipzig Kings en 2023), su historia refleja bien el tipo de jugador que encuentra en esta liga una segunda oportunidad para brillar.
Conclusión
La victoria del sábado es, en muchos sentidos, un espejo de lo que han sido los Steelers tantas veces: equipo de talento, con carácter, pero propenso a relajaciones peligrosas. Y, como en Pittsburgh, los Bravos tienen en su vestuario a jugadores que saben lo que es pelear por un hueco en la NFL.
El siguiente compromiso para los Bravos será el sábado 7 de junio ante Fehérvár Enthroners, en lo que será su primer partido fuera de casa. Será una buena ocasión para confirmar sensaciones… y para demostrar que este equipo, como los Steelers en sus mejores años, no solo gana, sino que aprende de cada paso.