El éxito del programa de football de Alabama es inversamente proporcional al interés de los Steelers en sus jugadores. Pero, ¿por qué?.
Se acerca la fecha del draft de la NFL de 2021 y en numerosos Mocks Draft de expertos y aficionados, se habla mucho del RB de Alabama, Najee Harris, como el jugador elegido por los Steelers en el pick nº 24. Y realmente sería una gran alegría para muchos de los seguidores acereros, amantes como son del juego de carrera. El cuerpo técnico del equipo se ha reunido con él en su pro day, y el bueno de Najee se ha mostrado muy interesado en agradarles. Se trataría de una elección del todo lógica, si no fuera porque proviene de… Alabama.
Los Steelers no han seleccionado a un jugador de Alabama en primera ronda desde 1951, cuando para sorpresa de todo el mundo, con el pick nº 9, seleccionaron a Clarence “Butch” Avinger, que se desempeñaba como QB, fullback y punter.
La truculenta historia de esta selección fue contada por Chester L. Smith para The Pittsburgh Press: El que fuera entrenador del equipo en 1951, el joven John Michelosen, que obtuvo el cargo tras la muerte de Jock Sutherland en 1948, se encontró con Avinger en el juego de estrellas universitario entre Norte y Sur disputado ese mismo año. Y quedó totalmente prendado de él. Cuando regresó del partido, informó a Art Rooney y al director de relaciones públicas, Ed Kiely, que él sería la selección de primera ronda del equipo. Esa afirmación dejó descolocados a Rooney y Kiely, ya que ambos tenían en mente a Chuck Ortmann de Michigan. Kiely se desesperó, ya que creía que elegir a un desconocido Avinger por encima de Ortmann, sería todo un escandalo para la prensa de Pittsburgh, y esperaba un linchamiento de los medios locales. Michelosen, que estaba haciendo un buen trabajo, recibió la bendición de Art, y se salió con la suya. En efecto, sorprendió a todo el mundo. Y como curiosidad, hay que decir que Ortmann cayó hasta el pick nº 20, y finalmente Art Rooney pudo seleccionar al jugador que quería. Para desgracia de Michelosen, no pudo disfrutar de su jugador sobre el campo, ya que este fue reclutado por la US Army. Michelosen fue despedido ese año, o mejor dicho, no fue renovado.
Avinger prefirió jugar en Canadá a su regreso del ejército, para acabar su cortísima carrera en los New York Giants en 1953, jugando esencialmente como punter.
Chuck Noll tampoco era muy amigo de la universidad de Alabama. Durante sus 23 años como entrenador del equipo, sólo eligió a Paul Harris en la sexta ronda de 1976, el cual no llegó a jugar con el equipo, y a Efrum Thomas en la undécima ronda de 1991, que tampoco entró en el equipo…
Por su parte, el único que elegiría Bill Cowher llegaría en la cuarta ronda de 1998, cuando Deshea Townsend escuchó su nombre por parte de los Steelers. Twonsend sí que entró en el equipo, en un primer lugar ayudando en equipos especiales, para más tarde convertirse en CB titular. Doble campeón del Super Bowl, y con una actuación destacada en la SB XL, cuando capturó a Matt Hasselbeck en los minutos finales.
Desde que Kevin Colbert se convirtió en gerente general de los Steelers, solo ha elegido a dos jugadores de Alabama, los linieros defensivos Joshua Frazier en 2018 y Isaiah Buggs en 2019. En séptima y sexta ronda respectivamente.
Colbert también se hizo con los servicios de Minkah Fitzpatrick, pero en un canje con los Miami Dolphins, pero al fin y al cabo, se trata de un jugador salido de Alabama.
El resumen es que la franquicia tan sólo ha elegido a unos 15 jugadores de Alabama en toda su historia, y además, casi todos antes de los 60.
Buscando razones plausibles para el poco interés de los Steelers en elegir a los jugadores de Alabama con su primer pick, puedo argumentar que el peor récord del equipo durante los últimos años ha sido un 8-8, lo que significa que siempre elegimos en la parte media-baja del draft, por lo que las magníficas estrellas del fantástico programa de football de Alabama ya no estaban ahí para ser elegidos.
Lance Zierlein va más allá, y opina que Pittsburgh tiene por costumbre elegir a jugadores muy jóvenes y maleables, el mejor ejemplo es Juju, para formarlos y moldearlos a su gusto. El programa de Nick Saban es muy intenso con los jugadores, y es tan exigente que muchos llegan a la NFL al máximo de sus capacidades, ya que han sido llevados a su límite, tanto física como mentalmente.
Si tuviera que apostar mi dinero, es seguro que me decantaría por algún jugador de Ohio State, como la primera elección del equipo, ya que es el programa que más gusta en las oficinas de la franquicia en los últimos años. También Tennessee y Florida han sido elegidos en más ocasiones que el resto. ¿Será el 2021 el año en el que se rompa esta maldita tradición? ¿Elegiremos en primera ronda a un chico de Alabama tras 70 años?
Habrá que esperar…